Investigadores internacionales de chicago, de Harvard, del hospital de mujeres de Boston y la Universidad de Oviedo han creado unas moléculas que mediante animales, han demostrado su valía terapéutica en el tratamiento de canceres de cabeza y cuello.
Las nuevas moléculas son derivadas de la proteína AMP 18, consiguiendo retrasar el crecimiento del tumor y disminuir los efectos adversos de la radioterapia.
La molécula está formada por la unión de varios aminoácidos que intervienen en el crecimiento de las células epitelia normales y mitigan la mucositis oral que es uno de los efectos adversos, y actúa también sobre las células cancerígenas.
El estudio sobre la AMP 18 (Gastrokina 1) se probó clínicamente en animales, a los cuales se les inyectaba estas células en la parte anterior de la lengua, y en los tumores que se habían creado en los animales, aparte de someterse a radioterapia.
El tamaño de los canceres se analizo mediante imágenes in vivo y la extensión de la mucositis oral se comparo entre los animales tratados y un grupo de personas de control.
Con ello Juan Luis Fernández Martínez, director del grupo de problemas inversos, optimización y aprendizaje automático del departamento de Matemáticas de la Universidad de Oviedo ha indicado que “los resultados del ensayo revelaron una «sinergia» entre la administración de este péptido y la terapia de radiación. Así, los tumores tratados con esta molécula mostraron un crecimiento inhibido con respecto a los que solo recibieron radioterapia. Además, el AMP-18 retrasó el inicio de los tumores y redujo la severidad de la mucositis oral inducida por la radioterapia”
Aparte subrayo que la colaboración de la universidad de Oviedo, consistió en un análisis bioinformatico de las vías genéticas, implicadas tras la administración de las moléculas a las células cancerígenas, centrándose así en el estudio de expresión de los genes durante las diferentes etapas que dura la administración del fármaco, junto a las búsquedas de los cambios de células tanto cancerígenas como las que no lo son, consiguiendo con ello testar los efector fármacos genómicos y sus mecanismos de acción.