Expertos de la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, han descubierto que la hipermetilación -la capacidad epigenética para rechazar o desactivar un gen defectuoso implicado en entre el 10 y el 30 por ciento de los pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y degeneración frontotemporal (FTD, por sus siglas en inglés)- sirve como una barrera protectora inhibiendo el desarrollo de estas enfermedades. Su trabajo, publicado en ‘Neurology’, puede indicar un objetivo neuroprotector para los esfuerzos de descubrimiento de fármacos.
Más información: Revista serCapaz Nº 55.