Hugh Herr, el ingeniero de las prótesis biónicas que él mismo porta, es el ganador del Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica, al haberse impuesto a otros investigadores como Margarita Salas, la prestigiosa bioquímica española.
Hugh Herr sufrió un accidente en 1982 cuando escalaba en el Barranco de Huntington (Nuevo y estuvo perdido durante tres días a temperaturas de más de 20 grados bajo cero. Sus piernas se le congelaron y tuvieron que amputárselas por debajo de las rodillas.
Por ello, decidió volcarse en el diseño de piezas protésicas para volver a escalar y para ayudar a otras personas que, al igual que él, han perdido sus extremidades y necesitan prótesis.
Herr se formó en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y dirige el laboratorio ‘Biomech’.
Es el fundador de la compañía BiONx Medical Technologies (antigua iWalk), encargada de comercializar BiOM® una prótesis de miembros inferiores que proporciona energía emulando la función muscular e imitando el movimiento del tobillo y que aporta una estabilidad que se ajusta a cualquier superficie.
El Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica está dotado con 50.000 euros, una reproducción de una escultura de Joan Miró, un diploma y una insignia.