La fibromialgia, es el problema más común detrás de la osteoartritis, aunque todavía es un problema desconocido, ya que cuenta con dificultades para ser detectada a tiempo, debido a que no suele tener síntomas claros, y tampoco una causa que justifique los dolores y malestar del que se quejan los pacientes.
En los últimos estudios, realizados por Daniel Caen, profesor en la universidad de Michigan, se ha descubierto que suele prevenir el dolor, del cerebro y de la medula espinal, en vez de los puntos donde puede presentarse las quejas. Un gran número de las afectadas, por no decir toda, son personas con importante historiales de dolor crónico, que no está causada por ningún daño ni inflamación y está acompañado por dolor de cabeza crónico, dolor visceral e híper correspondencia sensorial.
Debido a que la enfermedad, su origen está en el sistema nervioso central, se ha confirmado que los tratamientos opiáceos o analgésicos narcóticos, no son efectivos contra los dolores que esto produce, e incluso puede empeorar algunos puntos dolorosos, por lo que se recomienda mejor un tratamiento farmacológico con ejercicios y reducción del estrés, haciendo que el paciente consiga una mejoría de los síntomas y llevar una vida normal.