Kaden es un pequeño con atrofia muscular por lo que debe de ir en silla de ruedas, y no puede juguetear corriendo como otros niños.
En una salida que hizo con sus padres al centro de ciencias en el sur de Florida, y al acuario West Palm Beach, donde cuentan con actividades interactivas y educativas a través del juego, como es normal Karen quería jugar pero por su problema se encontraba con varios obstáculos para ello.
Su sorpresa fue que se encontraba allí también un niño mayor que él, que sin hacer ninguna pregunta incomoda, le vio, se acerco a donde estaba y se puso a hacer con él una una actividad, ayudándole a girar una palanca y recoger las bolas de colores brillantes que formaban parte de la exposición, junto con gestos muy dulces y cariñosos hacia Karden.
Este hecho se ha hecho viral en redes sociales, ya que desgraciadamente estamos en un mundo donde lo que tendría que ser normal llama la atención por raro…
Por lo que la madre de Karen agradece por completo el detalle que tuvo el menor con su hijo y dando con ello un ejemplo de cómo deberíamos de tratarnos entre todos ya que somos personas
ojalá que todas las personas cuando se hicieran adultas siguieran actuando en ciertos momentos de la vida como niños, ya que la inocencia, el no mirar mal al de al lado y el buen corazón no hay que perderlos nunca al igual que tener actitudes y valores solidarios que casi están en extinción.
Una vez más los niños dan una gran lección a los adultos y sobre todo al mundo.