Almudena Ramón Cueto, lleva más de 25 años investigando el funcionamiento del sistema nervioso central, y a sus 52 años ha devuelto parte de la vida a 3 tetrapléjicos, a través de su técnica regenerativa medular, médico-multidisciplinar, que se aplica de forma personalizada a cada paciente y carece de cirugía invasiva.
Con ello ha logrado, por primera vez en el mundo, crear expectativas ciertas a lesionados que no podían moverse.
Consta de tres fases: la primera, la más eficaz por sus resultados concretos, es la llamada activación muscular. Se trata de activar las neuronas con neurofármacos.
Posteriormente, el equipo multidisciplinar que dirige desde el Centro de Innovación Médica en Regeneración Medular (Cimerm) aplica el llamado trasplante de glía envolvente y la terapia de reinervación y estabilización funcional. Para ello se identifica los circuitos intactos y dañados en la glía envolvente del bulbo olfatorio (células detrás de la ceja), son las células del sistema nervioso que desempeñan la función de soporte de las neuronas e intervienen en el procesamiento cerebral. A esta segunda fase se añade una tercera de terapia, que prevé entre 8 y doce meses, la estabilización funcional.
Su objetivo es favorecer la reconexión específica de las fibras nerviosas, su activación y su estabilización.
Con esto, ha puesto en duda lo que la dijeron en la Facultad de Medicina, que la médula no se regenera, algo que ella ha puesto en cuestión con sus descubrimientos, aunque Ramón y Cajal, en 1910 aseguró que los axones cortados (prolongación de las neuronas) no regeneran debido a que se forma una cicatriz que crea entorno indebidos, pero en 1990, tras experimentar con ratas, se vio que los axones crecen espontáneamente y se regeneran.
Años después, demuestra que los axones seccionados medulares tanto motores como sensitivos crecían, cruzaban la zona de la lesión y regeneraban en el interior de la medula. Si éstos se regeneraban, se podían trasplantar a la médula espinal, marcando con ello,un antes y un después en el tratamiento de lesiones medulares, al conseguir que un lesionado medular paralizado de cintura para abajo logre andar.
Espero que todos los pacientes se puedan beneficiar de un nuevo tratamiento y erradicar esta patología de nuestro libro de afecciones médicas», concluyó con el orgullo de haber demostrado que España no sólo es pionera en este tratamiento, sino que gracias a su tesón también es líder mundial.