Natividad Herrero, de 48 años, trabajadora hasta hace unos meses de cajera de un supermercado en la localidad de Portugalete, pero en el 2015 ,la vida la dio un giro muy brusco, perdiendo a su hermano en febrero por muerte súbita y en septiembre la detectaron un tumor en el pecho izquierdo, del cual necesito ser intervenida y a los 9 días de la operación, recibió su carta de despido debido a sufrir cáncer.
Aunque el centro, perteneciente a la empresa Itsassmai S.L., alega que el despido fue por causas objetivas económicas y organizativas, aunque su abogado Iñigo Molinam asegura que este despido vulnera la salud e integridad de las personas, por lo que se solicita ante los tribunales que se considere despido nulo, obligando a readmitir a la trabajadora y abonarle la cuantía correspondiente, desde que se la despidiera.
El acto de conciliación, tuvo lugar el 28 de Diciembre, en Bizkaia, el encuentro se realizo entre el responsable de la empresa y el abogado de Natividad, ya que ella tenía sesión quimioterapia, aunque no llegaron a ningún acuerdo.
La empresa se defiende de las acusaciones, comunicando que la carta la llego estando de baja, pero la decisión fue tomada hacia tiempo, antes inclusive de conocer su problema de salud.
Por lo que finalmente, Natividad, recibo solo 2.782, 85 €, tras 3 años trabajando, se ha quedado sin el único ingreso económico de su familia, aparte de una mínima pensión de incapacidad que cobra su marido, y aunque tiene un hijo, este también fue despedido en marzo de otro supermercado perteneciente a la misma empresa y sin derecho a paro, por tener solo 10 meses cotizados.