El Cermi como miembro de somos pacientes pidió el 8 de julio al nuevo gobierno la aprobación de una normativa que obligue a las gasolineras a contar con personal de atención al público y que no se presienta de ellas con la excusa del ahorro económico, ya que son numerosas las quejas de usuarios que ven mermados cada vez más sus derechos como consumidoras a no poder recibir un servicio de calidad en la gasolinera, donde sin necesidad de tener conocimientos sobre ello el cliente se ve forzado hacer de su propio operario sin que esto se note en su bolsillo a la hora de pagar.
Especialmente señalan el impacto que esto tiene en las personas con movilidad reducida o discapacidad que no puedan llevar esta acción ellos solos y que ven que tampoco existe persona de atención en la gasolinera que les ayude, por lo su movilidad y autonomía se ven gravemente afectadas.
Por lo que para el Cermi se hace necesario asegurar la protección de todos los consumidores a la vez que se debe hacer visible la no discriminación de las personas con discapacidad, por lo que se hace obligatoria la existencia de una ley que regule la existencia de personal de atención al público en todas las estaciones de servicio y en especial que estas presten su apoyo y ayuda a los conductores con discapacidad o movilidad reducida.
Por ahora ya se ha planteado esta modificación a la defensora del pueblo que deberá elevarla al parlamento y ello al poder ejecutivo.